miércoles, 14 de noviembre de 2012
jueves, 18 de octubre de 2012
sábado, 29 de septiembre de 2012
Ella camina sola.
Después de 20 años de "vivir en familia"solo le dijeron adiós. En un juicio alevoso fue
juzgada y sentenciada sin poder objetar nada, solo escucho; ¡Culpable!
¡Culpable! ¡Culpable!
Como
si un ser humano fuera una cosa, le apartaron del hogar. A su familia le dedico toda su vida, en cuerpo y alma, a cambio nada recibió. La vida es extraña, hoy María a sus 40 y tantos lo sabe.
Ella
camina sola, en su cuerpo lleva las
huellas de la vida que llevo, en su alma lleva las marcas de quien alguna vez
la lastimo y en el corazón tiene un hueco, un vacio por la “familia” que solo
le dijo adiós.
Ella camina sola, cuando se dirige a su trabajo, de regreso a
casa y las tardes de domingo.
Por fin ya
no tiene a quien rendirle cuentas, ya no hay quien la regañe;
--¿Donde chingados andabas cabrona?
Nunca
más volverán a escuchar sus oidos, nunca más.
No más celos, no más injurias, no mas violencias. No más.
No más celos, no más injurias, no mas violencias. No más.
De
alguna manera hoy piensa que salió ganando, pues, la maquina que lavaba ropa, la
cocinera, la mujer que hacia el aseo, el ser humano que nunca se quejo, al fin
descansara.
Ella
camina sola, sin embargo ahora es independiente, tiene un trabajo y gana su propio dinero, libremente convive con sus amig@s y descubrió que a sus 40 y tantos esta viva y aun tiene mucho por
vivir.
Ella
camina sola, ella camina libre, ella camina sonriente.
Por
las calles vacías, en las tardes lluviosas, aun en la obscuridad, ella camina
sola… pero inmensamente feliz.
martes, 28 de agosto de 2012
Mi amigo "Leo"
Por
azares del destino, que un día contaré, antes de llegar a los cuarenta años me convertí
en abuelo…
Fue
una noche muy difícil para mi hija Karina.
En esos momentos quisiéramos ser
nosotros los que estuviéramos en el quirófano y no nuestros hijos. Algo salió
mal. Una enfermera nos informo que a “el producto” se le fue liquido amiótico a los pulmones, como
consecuencia, “el producto” convulsiono al nacer y que muy probablemente tendría
secuelas muy graves de locución y/o en el sistema motriz pues el cerebro dejo
de recibir oxigeno por mucho tiempo y eso “mata muchas neuronas”, por el
momento estaría en una incubadora
especial conectado a un respirador artificial esperando que sus pulmones
se adaptaran. Lo reportaron muy grave con pronóstico reservado.
Las
horas siguientes fueron muy tensas. Larga espera en esos pasillos de hospital, donde
sentado en una silla incomoda el silencio se combina con el aroma de los
medicamentos. Horas eternas. Enfermos deambulando, doctores corriendo.
Desesperación, incertidumbre. Sangre y enfermedad. Con la mirada perdida y las manos juntas,
apretadas, en esos instantes suplicamos al todo poderoso misericordia por aquel
que sufre, por aquel que lucha entre la vida y muerte.
Después
de otra larga noche, mi hija estaba descansando en una camilla, ojerosa, sumamente
pálida, el suero conectado a una vena en su brazo derecho no le permitía
moverse mucho. Al verla trate de sonreír,
creo que no lo logre, le di un beso en su mejilla y acaricie su rostro, con una
débil voz trato de decirme lo que ya sabíamos, mas sus lagrimas se lo
impidieron.
–Ahora no hija, ahora no, solo descansa-- Le
dije mientras trague saliva.
Un
doctor me indico que le acompañara, esté, me llevo por algunos pasillos,
pasamos los cuneros, el área de incubadoras, cada vez nos alejábamos mas…
algo cimbro mi interior. Mientras
caminábamos detenidamente el doctor me describió a detalle los posibles
escenarios y el tipo de vida que tendría mi nieto (por alguna razón creía que
yo era el papa).
Por
fin llegamos a una habitación grande, había muchas “incubadoras de
especialidad” todas vacías, en ese lugar
estaba una con forma de cilindro de cristal, como de un metro de diámetro y unos
dos metros de altura, en su interior estaba mi nieto en una especie de diván
invertido, el estaba boca abajo con los
brazos y
pies extendidos, en su nariz había unas diminutas mangueras que según me
dijo el director era lo que le mantenía vivo pues aun le costaba trabajo
respirar. Allí estaba yo contemplándolo. Lo vi luchar por vivir. Toque el
cristal y en mi mente le dije:
--¡Anda
muchacho tienes que vivir!—
Como
única respuesta vi su dorso que se
agitaba rápidamente como si fura un caballo en loca carrera.
Sin
dejar de mirarlo le pregunte al doctor;
--¿Cómo
y cuando sabremos el verdadero daño y las consecuencias de esto? Dígame la
verdad, al menos para estar preparados. —
--Bueno,
ya que lo pregunta los daños a veces no son notorios al principio, será una
larga espera… no se… si se adaptan sus pulmones, le podríamos dar de alta en 72
horas, de allí en adelante como le dije dependerá de la fortaleza del niño…
habrá que realizarle algunos estudios, encefalograma, resonancia magnética,
electrocardiograma entre otros…
Suspire
hondamente, di la media vuelta y deje solo a mi nieto en esa habitación fría y
solitaria. De todo corazón le desee éxito en su primera batalla en esta vida…
Los médicos le dieron de alta al séptimo día.
Los médicos le dieron de alta al séptimo día.
Hoy gracias a Dios Leonardo Daniel tiene 7 años.
Tiene una salud envidiable. No sufrió secuela alguna.
Continuamente
caminamos juntos de la mano, trato de describirle el mundo lo mas claro
posible, siempre paciente y amable pues todo el mundo es nuevo para el, cuando
una duda es despejada siempre queda en el una cara de asombro. Pasamos largos
tiempos de convivencia sana y alegre. A veces disfrutamos de un helado o quizás
abrazados vemos el televisor. Lo más importante es que somos grandes amigos, y
por alguna razón nunca me dice “Abuelo”, simplemente me dice; “Quique” y yo le
llamo “Amigo”. Se que en tiene un gran
amor por mi
Es
ese afecto sincero y puro lo necesitare para mi verdadera vejez, es decir, en esa época en que mi mente ya no será
lucida, mis movimientos serán torpes y muy probablemente necesite una mano
amiga a mi lado para caminar, para alimentarme…
Es
común ver a los ancianos solos, abandonados, despreciados, prácticamente como
un estorbo. ¿Por que? Eso no lo se,
tampoco se a ciencia cierta como será en realidad mi vejez.
Un día somos niños, otro día ancianos.
Ser
anciano es sinónimo de experiencia, sabiduría e inteligencia.
Espero un día llega llegar a ser un gran anciano.
Ese
día… caminare de la mano de mi amigo; Leonardo Daniel.
Por
cierto, tengo otro nieto Axel Enrique, pero esa, esa es otra historia…
domingo, 5 de agosto de 2012
martes, 24 de julio de 2012
Las golondrinas.
¡Damos por clausurado el ciclo escolar 1978-1979, que pasen unas felices
vacaciones, hasta pronto! --se escucho a través de los
altavoces de la escuela primaria Belisario Dominguez.
Las
puertas de la escuela se abrieron de par en par.
Había tantas personas que en un momento era imposible salir.
Había tantas personas que en un momento era imposible salir.
Al
fondo se escuchaban “Las golondrinas”.
Los
alumnos rompimos las filas, de pronto todo era un caos, con la mirada busque a
mi hermano Gerardo, cuando lo vi,corrí hacia el y lo tome de la mano.
Solos y en silencio a pesar de la muchedumbre, nos dirigimos a casa.
Solos y en silencio a pesar de la muchedumbre, nos dirigimos a casa.
Durante en
el camino vimos a muchas familias, estas se veían contentas. Los padres felicitaban a sus hijos,
todos sonreían, en algunos momentos el padre orgulloso observaba las boletas de calificaciones con una gran sonrisa en su rostro, mientras la madre
abrasaba efusivamente a sus hijos. Todos caminaban tomados de las manos.
Eran muchas familias.
Mi hermano también se dio cuenta de “esa situación” y me pregunto:
Eran muchas familias.
Mi hermano también se dio cuenta de “esa situación” y me pregunto:
--¿Por qué no vino mi
mama?--
Encogí los hombros mientras mis labios
hicieron un arco hacia abajo, nos miramos a los ojos, me quede callado y apreté
su mano.
Al
llegar a casa, como siempre salte la barda y abrí la puerta. Decidimos ver la
televisión toda la tarde.
Como siempre solos, juntos y abrazados.
El sueño venció a mi compañero, mientras tanto, (yo) no dejaba de pensar en esa ceremonia.
Como siempre solos, juntos y abrazados.
El sueño venció a mi compañero, mientras tanto, (yo) no dejaba de pensar en esa ceremonia.
“ Yo
tenía 8 años y desde muy temprana edad he tenido conciencia de muchas cosas, es
decir, no vivía mucho de fantasías y sueños, me daba cuenta fácilmente de las
realidades, así que, comencé
mentalmente a analizar como habia transcurrido la
ceremonia; bailes, tablas rítmicas, poesías y en algún momento anunciaron la
entrega de diplomas.
La
voz oficial del evento era la maestra Sandra , esta, en algun momento, comenzó a
nombrar a diferentes alumnos, mismos que se acercaban a el podio y recibían
el prometido reconocimiento. Yo siempre fui de muy buenas calificaciones,
y por alguna razón, estaba seguro de que recibiría alguno de esos diplomas, pues simplemente era superior en conocimientos a cualquiera de mis compañeros. Cuando llego el turno del cuarto grado mi corazón comenzó a latir
aceleradamente…
-- El tercer lugar es
para Federico García Hernández—
Federico
mi compañero, salió de entre la fila, rápidamente corrió a recibir su
diploma, ágil cual ardilla, sumamente alegre, su uniforme lucia impecable, sus
zapatos relucientes y su cabello bien peinado… yo atónito, mire mis zapatos,
estaban muy sucios, vi mi uniforme arrugado y roto pues estaba en pésimas
condiciones, de hecho ni siquiera me había peinado, mucho menos bañado, así con
esos nervios y de pie en la formación, comencé a apretar mis manos mientras frotaba mis zapatos en la parte trasera del pantalón, sin darme
cuenta todo termino y mi nombre nunca se escucho por los altavoces.
Eso además de tristeza me dejo perplejo.
Eso además de tristeza me dejo perplejo.
Allí
sentados “observando el televisor” mi hermano Gerardo continuo dormido y yo absorto, asi transcurrió aquella la tarde.
Al llegar nuestros padres, como si estuviéramos de acuerdo, corrimos a enseñarles nuestras boletas de calificaciones, para nuestra decepción, ellos, solo de reojo las vieron, cenaron y se fueron adormir.
Al llegar nuestros padres, como si estuviéramos de acuerdo, corrimos a enseñarles nuestras boletas de calificaciones, para nuestra decepción, ellos, solo de reojo las vieron, cenaron y se fueron adormir.
Nosotros
vivíamos del comercio y eso era motivo de que regresaran (nuestros papas) sumamente cansados
y muy tarde. En ese tiempo vivíamos en una colonia nueva, Izcalli Del Valle, un
suburbio lejos de la zona de trabajo, así que a juicio de los padres fue
mejor dejarnos solos en casa y cerca de la escuela, para nosotros fue:
Estar solos en casa y
lejos de la familia.
Izcalli
del valle en Tultitlan Estado de México, fue uno de los primeros
fraccionamientos diseñados especialmente para los trabajadores, al ser casas de
interés social se descontaba una pequeña parte del salario del trabajador y así facilmente tener un patrimonio. Los beneficiarios de este programa inicialmente
fueron trabajadores de confianza y obreros; Ford motor compani, altos
hornos de México, Volkswagen , bacardi y cia,
compañía de luz y fuerza, es decir únicamente clase media con ingresos
fijos. La casa era de mi tía Marina que trabajaba en la Ford, al ser ella
soltera pensó en mi Madre, así que ella pago las mensualidades y creo su patrimonio y un hogar para nosotros.
Las
casas eran muy grandes (comparadas con las de ahora) tres recamaras,
sala-comedor, cocina, baño, zotehuela, un gran patio y jardín, no había
bardas que dividieran los predios y de la banqueta a la puerta de cada casa,
unas piedras marcaban el camino a seguir, que dicho sea de paso todos
respetaban.
Así, en ese escenario, daría inicio este verano, el verano del año 1977.
En este “nuevo estilo de vida” solo el padre salía muy temprano de su hogar, asi a las a 6.30 am ya no había ni un solo papa en casa.
En cada hogar la familia completa dormía hasta muy tarde, era lógico.
¿Para
qué levantarse sin no hay nada que hacer?
Eran
tiempos muy holgados, despreocupados y además vacaciones.
Más
o menos a las 14.00 pm se asomaban los primeros niños, aun con
chinguinas en los ojos…
Toc,
toc, toc -- Señora ¿deja salir a jugar a miguel?— insistía un
niño en una puerta.
Así,
poco a poco, la calle se inundaba de niños y de los juegos clásicos en los
cuales la imaginación era el principal motor de la diversión. Las niñas
saltando la cuerda, jugaban al resorte, los niños jugando canicas, algunos
futbol, mas tarde se unían todos; era tiempo de la máxima diversión con juegos
que involucraban desde el más pequeño al más grande, las escondidas, la rueda
de san miguel, los pajaritos, las coleadas, boli-bol, los encantados, el avión,
la guerra, los ollitos, cuando estábamos cansados, corríamos a tomar agua de la
llave, de cualquier patio, pues los dueños de las casas te lo permitían, como a
las 9 o 10pm. Se comenzaban a retirar los niños, papá había llegado y a un grito de su madre, uno a uno, regresaban
a su hogar y después de cenar se iban a
dormir.
En
la televisión no había nada de basura,
el pájaro loco, las fantasías animadas de ayer y hoy, el conejo de la suerte, Popeye,
porqui, speddy González, y como no mencionar las series infantiles; Remi y
Heidi. Desde luego no había domingo sin chabelo.
Así
fueron esos días de verano, todos en aquella cuadra de ese suburbio nos
volvimos una gran familia, éramos como 30 niños de 6 hasta 11 años, corríamos
libres sin miedos, pues no había pandillas ni drogas. Las calles eran todas
nuestras, había muy pocos coches, vivíamos sin discriminación alguna y sabíamos
el significado de lo que es el compañerismo, hermandad y amistad.
Sin
internet, computadoras, consolas de juegos ni teléfonos celulares, fuimos
inmensamente felices ese verano de 1978.
Las
cuerdas de saltar, las canicas y las pelotas regresaron a su lugar.
EL
regreso a clases fue inminente.
Sin darnos cuenta poco a poco fuimos
creciendo.
Pasaron algunos veranos más.
Un
día fue mi turno y llego la salida del sexto grado.
Después
de una misa de acción de gracias regresamos a la escuela. Hubo una
ceremonia muy emotiva, no había dinero para un traje, así que solo me
compraron un pantalón negro y una camisa blanca. Todos los alumnos de sexto
grado bailamos algo que pretendió ser un vals, al ritmo de la canción “Se
busca”, por cierto muy accidentado, mas de 200 niñ@s en un pequeño patio es un
verdadero desastre, además de un fotógrafo que se cruzaba todo el tiempo.
Después de la entrega de diplomas y reconocimientos, hubo una breve pausa,
anunciaron la clausura del ciclo escolar y se escucharon por los
altavoces “Las golondrinas”
Por
alguna razón nos comenzamos a abrasar y
a llorar, de alguna manera nos dimos cuenta que no regresaríamos mas a esa
escuela, que por seis años fue nuestro hogar. Nos dimos cuenta que dejábamos
una parte de nuestra vida en esos salones, dejábamos risas y alegrías en
el patio, como las golondrinas, teníamos que volar, el camino apenas comenzaba,
era la primera vez que nos desprenderíamos de nuestra segunda familia, los
amigos de la niñez.
Hoy en Izcalli del valle, todas las cosas son diferentes, las casas
tienen fachadas distintas, muchos comercios, vehículos por todos lados, hay
muchos grafitis y el entorno está sucio de tanta propaganda electoral que nunca borraron.
De
mis amigos, ninguno vive allí, incluso dos de ellos ya fallecieron, a manos de la delincuencia organizada.
Todos
como las golondrinas volaron y construyeron su propio nido.
Supe
que alguno de ellos es abogado, otro es chofer de microbús, alguno mas es
mecánico, las niñas ahora son secretarias, empresarias, amas de
casa, en fin, todos se casaron y tienen sus familias, sin embargo todos
tenemos algo en común; trabajamos para hacer de este México un mejor país.
El
ser humano, por naturaleza busca independizarse, inicia su propia aventura,
aunque al hacerlo tenga que dejar parte de su vida en algún lugar.
Las
golondrinas en invierno buscan lugares más cálidos para vivir, ahora se a donde
van las golondrinas.
Para
nuestro invierno, los humanos, procuramos un cálido hogar.
Por
cierto, nunca he recibido diploma alguno… con las
satisfacciones que la vida me ha dado, no lo necesito.
Mujeres
y hombres, alguna vez en la vida
extendemos nuestras alas, descubrimos que somos libres, abandonamos el
nido y nos atrevemos a vivir.
Por cierto mi hermano Gerardo tambien vivio a su modo las "golondrinas" pero. esa es otra historia...
Por cierto mi hermano Gerardo tambien vivio a su modo las "golondrinas" pero. esa es otra historia...
lunes, 18 de junio de 2012
Domingo 17 de junio 2012.
Los días nublados y lluviosos me gustan.
Conducir por las mañanas y en domingo es algo que disfruto al máximo. Hoy es
“El día del padre” y eso me pone a
reflexionar en algo; las mujeres que desempeñan es doble rol nunca son
reconocidas. Eso es lamentable. Salen a trabajar muy temprano, ya dejaron la
comida preparada, levaron a sus hijos a la escuela, durante el día se
desempeñan en todo tipo de actividades; barrenderas, choferes, en oficinas,
cocinas, aseo en casas, comerciantes, y otras que por respeto no he de
mencionar, el punto es que tienen, por amor, la necesidad de llevar el sustento
a su hogar. Al regreso a casa, son maestras que apoyan con sus tareas a sus
hijos, lavan ropa, el aseo del hogar es inevitable… así todos los días… ¿Cómo
es posible que un hombre sea capaz de renunciar a una mujer que todo le
entrego? Pero así es, y a veces, creo
que es lo mejor, no tienen por que soportar (las mujeres) insultos, golpes,
desprecios, humillaciones, daño sicológico… tanto daño hacen esa clase de
hombres… y todavía se aparecen (hoy) y quieren que los hijos les hagan una
estatua y les den un reconocimiento.
En fin.
En otro orden de ideas, también pienso en los
que si son hombres y hacen bien su tarea. ¿Cómo sabemos, si nos hemos
desempeñado bien como padres?... sin saberlo hoy la vida me daría esa respuesta…
Al llegar comencé a hacer mis labores
cotidianas.Revisando en “Face” vi diversas felicitaciones y … me encontré una
carta que me escribió mi hijo (¿?) Sorpresa absoluta. La transcribo tal cual…
Papá,
Me ha tomado muchos años el poder valorar justamente lo que has hecho por mi. Desde que te conocí hasta el presente. Ahora lo comprendo. No tengo cómo expresarte mi gratitud. Gratitud es sentir que has recibido algo que sabes no podrás pagar jamás. Eso siento por ti. Me has dado mucho: tu nombre limpio y digno, tu ejemplo recto, tiempo, amor, paciencia, además de tu visión anticipada de un futuro que exige cada vez mejores hombres.
Me ha tomado muchos años el poder valorar justamente lo que has hecho por mi. Desde que te conocí hasta el presente. Ahora lo comprendo. No tengo cómo expresarte mi gratitud. Gratitud es sentir que has recibido algo que sabes no podrás pagar jamás. Eso siento por ti. Me has dado mucho: tu nombre limpio y digno, tu ejemplo recto, tiempo, amor, paciencia, además de tu visión anticipada de un futuro que exige cada vez mejores hombres.
Ser padre no es fácil. Nadie te da un manual de instrucciones y cada hijo es diferente. En tu caso la tarea es doblemente difícil, dada la naturaleza voluble e inquieta de tu hijo; ni yo mismo me entiendo en ocasiones. Ser mi padre no ha de ser nada sencillo. Tú has sabido hacerlo de tal forma que no tengo nada que reprocharte; haz sabido ser el más confiable, constante y presente de todos mis amigos. Haz preparado para mí un futuro luminoso, del cual yo estoy ahora tomando las riendas. Nos has dado todo lo que es tuyo, incluyéndote a ti mismo.
Te pido que tengas confianza en tu obra: haz sabido hacerme fuerte, hábil, y a distinguir lo bueno de lo malo. Confía en mí. Tú me diste la vela y el mar: déjame navegar y verás que no te defraudaré.
Ahora quiero que sepas que todo lo que haga, todo lo que logre, hoy o mañana, es gracias a Dios, a ti y a mi madre. Y nunca olvidaré cuanto te debo. Siempre ocuparas una posición de honor en mi corazón, en mi mente, en mis frutos.
!! Te quiero tanto Papá!!
Tu hijo
Luis
Me quede mudo y con lagrimas en los ojos. Luis
Alberto tiene 24 años y de mis hijos es el mayor. Convivimos todos los días e
incluso a diario cenamos juntos en familia. El me enseño a ser de verdad un
padre. Con el cometí muchos errores, mismos, que nos hicieron crecer como
familia y hoy es posible que vivamos en armonía.
Nadie nace sabiendo y para ser padres nunca
nos preparamos. Las fallas que tuve traté de enmendarlas de inmediato, renuncie
a mi arrogancia, a la intolerancia. Puse en mi una semilla de empatía y
simplemente deje que mis hijos me educaran… simplemente.
Cuando un hijo reconoce el trabajo que ha
hecho en el su padre… es por que ya es todo un hombre.
De otro modo, también, llega el momento en el
cual le reprochara todos sus errores y le despreciara toda la vida.
Hoy es mi día de pago.
Hoy estoy alegre, le doy gracias a Dios por
los hijos que puso en mis manos, pues ellos me educaron e hicieron de mi lo que
soy.
Hoy estoy feliz, pues mi hijo sabe que “En los
momentos de reflexión crece el hombre”
“Tú me diste la vela y el mar: déjame navegar
y verás que no te
defraudaré”
Gracias hijo mío.
miércoles, 13 de junio de 2012
Amor eterno.
domingo, 3 de junio de 2012
La promesa que les hice.
Jueves, 8.30 p.m. En la obscuridad conduzco por la autopista 86 Mexico - Reinosa, toda mi familia viaja dormida en nuestra camioneta; mi esposa, hijos, nietos y
yerno, regresamos de un viaje corto a un balneario en el estado de
Hidalgo, que dicho sea de paso, es un paraíso: “El
tephe”. Alberca de olas, áreas verdes,
aguas termales, toboganes y comida con sabor a provincia aderezada
con mucha, mucha, diversión. Todo el día nos la pasamos en el agua. Yo
estuve tres horas en la alberca de olas. Un pequeño descanso, una cerveza helada… y a nadar, otra vez, lento y suave. El agua tibia y yo, éramos uno solo. De vez
en cuando abrazando a mi esposa, quizás alguno de mis hijos o tal ves
algún nieto. En estos paseos cortos, trato de aislarme de vez en cuando, es decir, busco aislarme pues disfruto mucho la soledad, busco paz en mi interior y mi familia me lo permite.
Hacía algún
tiempo les había prometido ese viaje.
Hoy se cumplió la
promesa.
A punto de llegar
a casa, todos comenzaron a estirase y bostezar como cuando suena el despertador,
con los rostros enrojecidos recuerdo de
ese día de diversión. Todos coincidían en una cosa; “Estamos
cansados y tenemos hambre papá”….
¿A caso yo no tenía hambre? ¿A caso nunca me canso?
-- Muy buenas noches, bienvenido a Dominos pizza, ¿le tomo su orden? bla, bla, bla, bla, bla, ¿Queso extra? Bla, bla, bla, bla…
Para ser honesto solo entendí que mi pedido estaría en 30 minutos…
Luis (el mayor) ya es un hombre, toma libremente sus decisiones y asume las consecuencias de sus actos.
Karina es una mujer, casada, con dos hijos, sabe que toda acción tiene una reacción, sabe que la estabilidad de un hogar depende de uno mismo, de la tolerancia y respeto.
Alison a su corta edad es una mezcla de los que son sus hermanos, es disciplinada y absolutamente responsable de su vida.
Las cosas materiales el creador las ha provisto.
Como lo hace todo padre y madre que de verdad ame a su familia.
La promesa que les hice.
¿A caso yo no tenía hambre? ¿A caso nunca me canso?
-- Muy buenas noches, bienvenido a Dominos pizza, ¿le tomo su orden? bla, bla, bla, bla, bla, ¿Queso extra? Bla, bla, bla, bla…
Para ser honesto solo entendí que mi pedido estaría en 30 minutos…
Luis (el mayor) ya es un hombre, toma libremente sus decisiones y asume las consecuencias de sus actos.
Karina es una mujer, casada, con dos hijos, sabe que toda acción tiene una reacción, sabe que la estabilidad de un hogar depende de uno mismo, de la tolerancia y respeto.
Alison a su corta edad es una mezcla de los que son sus hermanos, es disciplinada y absolutamente responsable de su vida.
Las cosas materiales el creador las ha provisto.
Como lo hace todo padre y madre que de verdad ame a su familia.
La promesa que les hice.
Al parecer el
papá nuca se cansa, de ser así… ¿Con quién se quejaría?
A veces me
pregunto: ¿Por que esos días, que se supone, son para
descansar, regresamos más cansados?
Después de
someterlo a votación, la decisión fue que cenaríamos pizza. Nadie tenía ganas
de cocinar. Solo comer y “descansar”
(?) así que tendríamos una breve parada en un centro comercial.
Como todos venían
“cansados” , solo mi hija Alison y yo descendimos de
la camioneta. En la oscuridad del estacionamiento subterráneo le tome de la
mano, como siempre lo hago. Un gran bostezo vi en su rostro…
--¿Cansada?- le dije en tono de sarcasmo, levantando una ceja.
-- ¡Papiiii!-- fue lo único que pudo pronunciar al mismo tiempo
que me abraso, mientras sus pies los arrastraba, pues de verdad eso de nadar sí
que fatiga el cuerpo.
Al llegar al
mostrador (de las pizzas) pedí mi orden
a un “robot-empleado” que al
atenderte no se inmuta en lo más mínimo. El fastidio por su trabajo era
visible, ademas que casi eran las 10 de la noche. Hablaba de una manera peculiar, como rezando un rosario y tener
prisa por terminarlo...
Nos
sentamos en unas mesitas pequeñas. Mi hija me abraso. Pasaron unos largos
minutos… largos… muy largos. El
cansancio y la fatiga hicieron que mis ojos comenzaran a cerrarse. Comencé
a cabecear, como lo hace un pollo moribundo. Con el ruido de los motores de
refrigeración de fondo, mi hija comenzó a acariciar mi cabeza…y
escuche murmurar… con enorme ternura;
--¡Papi, ya estas viejito… ahhh… ya te queda poco cabellito en tu cabeza, y, y ,y tus
canitas...ahhhh! ¡Prométeme que nunca te vas a morir! ¡Por
favor, prométeme que nunca te vas a morir!
Olvide el
cansancio, trague saliva, la mire a los ojos y le dije:
--Hija, sabes que
nunca te mentiría, esto es algo que no te puedo prometer…
Tarde o tempano, algún día, hijita mía, voy a morir…
Retire mi mirada
de sus ojos, me levante, con un nudo el la garganta, camine un poco. Un par de
lágrimas rodaron por mi rostro.
¿A que padre o
madre le gusta acariciar la idea de dejar a sus hijos solos, tengan la edad que
tengan?
Comencé a
recordar las promesas que algún día hice (a mi familia) y que por cierto, todas
cumplí, ya que, estas promesas, las hice por amor.
Le prometí a Dios
estar siempre al lado de mis hijos, pues el los puso en mis manos.
A mi
esposa le estar a su lado, en las buenas y en las malas, en la enfermedad y la
prosperidad, juntos de la mano recorremos a diario el camino de la vida.
Me prometí a mi
mismo una vida tranquila, con el favor de dios así ha sido.
Las pequeñas
cosas que les prometí, siempre se cumplieron; juguetes, mascotas, ropas,
cumpleaños, viajes, etc.
Siempre he
pensado que mi palabra vale y nunca he prometido imposibles. Jamás les he
mentido, sea cual sea la condición soy franco y nunca prometo, lo que no será.
Sé que no estoy
tan viejo, pero como sea ya viví… quizás un poco más
del que cualquier otra persona de mi edad. He visto como se han ido muchos familiares y amigos míos. A algunos la muerte les sobrevino de manera inesperada, otros, han fallecido a manos de la delincuencia. Definitivamente se que no somos eternos, al morir nada nos
llevaremos y nuestro paso por la vida es
efímero y fugaz.
La vida es tan
corta que apenas nos da tiempo de vivirla.
La vida me ha
dado lecciones y yo las he aprendido. Así nada mas, sin cuestionar, un día
aprendí que “El orgullo y la vanidad, salen más
caros que el hambre y la sed”
Sé de sobra que
"Hacer promesas sin cumplirlas es peor que mentir, pues hacen creer, soñar
y por ultimo llorar".
Y yo... Yo no soy
un mentiroso.
Hoy mi familia
sabe que solo queda una cosa por cumplir, les prometí caminar siempre a su
lado, ellos saben que siempre estaré allí.
Los saben por
que, lo que prometo, lo prometo con el corazón y lo sello con amor.
Ellos saben que
cumpliré…
domingo, 8 de abril de 2012
Eliza.
--Hola
Eliza buenas tardes, entras al aire en 10 segundos.
--Gracias Adán, ya estoy lista.
-- ¿Lista?.. Entras en 5, 4, 3, 2,1.
--Hola que tal muy buenas tardes, bienvenidos a radio ESAD, mi nombre es Eliza Jaime y este es tu programa “Eliza te hechiza con su voz…y te invita a leer un libro”…hoy vamos a leer las batallas del desierto de José Emilio Pacheco….
--Gracias Adán, ya estoy lista.
-- ¿Lista?.. Entras en 5, 4, 3, 2,1.
--Hola que tal muy buenas tardes, bienvenidos a radio ESAD, mi nombre es Eliza Jaime y este es tu programa “Eliza te hechiza con su voz…y te invita a leer un libro”…hoy vamos a leer las batallas del desierto de José Emilio Pacheco….
Eliza, como desde
hace algún tiempo, transmite por internet un segmento en la radio estudiantil
ESAD. (Educación superior abierta y a distancia). Y lo hace con gran
entusiasmo pues disfruta de la lectura así como de compartir la literatura con
los demás.
Hoy al terminar
la transmisión recibió una noticia que le lleno de tristeza. Por algunas
infracciones al reglamento, los directivos le informaron que dejara de
transmitir su programa hasta nuevo aviso…
Eliza es como
todos los jóvenes; rebelde e impetuosa, pero tiene una virtud; sabe obedecer y
es disciplinada, así que acato la orden y trato de enfocar sus pensamientos en
sus estudios.
Es el fin del cuatrimestre
y hay que poner todo el empeño posible. Lleva notas de 90 y 100,
así que no se puede dar el lujo de bajar sus calificaciones.
Necesita mantenerse allí: en la cima. La licenciatura en matemáticas la escogió pues sus habilidades se lo facilitan, además, esta cursando el sexto semestre de la licenciatura en derecho en el sistema abierto de la universidad autónoma de México (UNAM). Cualquiera pensaría que estudiar dos carreras al mismo tiempo es mucho trabajo, pero ella no, a veces por las tardes, da asesorías “en línea” de álgebra, geometría analítica, calculo integral y diferencial, matemáticas discretas y probabilidad a sus compañeros. Nunca esta quieta. Siempre quiere hacer algo. Siempre busca hacer más.
Eliza sabe que el
camino no ha sido fácil… y menos en una silla de
ruedas…
A temprana
edad la poliomielitis; terrible enfermedad que afecta la medula espinal, le
cambio la vida y marco su destino.
Los padres de
Eliza, por desconocimiento, casi no permitían que las personas le vieran, tampoco
permitían que tuviera contacto con el mundo exterior. Casi nunca salía a la
calle. Tuvo que aprender a leer en su casa.
Su abuela era su
gran compañía. Le lleno la vida de libros. Se los llevaba a escondidas
pues su madre no estaba de acuerdo, pues ella, es de la idea, que las mujeres
solo sirven para el hogar y a su esposo, como sea, en ellos
encontró lo que llenaría por fin su vida; mundos mágicos que en sus
sueños visita, novelas; en las que sueña ser la protagonista, sin embargo
encontró algo que nuca imagino… Educación y cultura, su
boleto para salir a conquistar el mundo…
Aun siendo
una niña sabe que son solo sueños… así que es realista
y tiene que pensar en su futuro pues no piensa estar allí toda su vida,
encerrada entre cuatro paredes.
Se prometió así
misma terminar cuando menos dos licenciaturas y así poder contribuir a
mejorar la situación familiar. Que por cierto no es muy buena.
Sus
hermanas menores clara y Sofía han estado a su lado toda su vida.
Dios en su infinita sabiduría nunca se equivoca. Puso a su lado dos
maravillosas compañeras que están allí todo el tiempo. Le asisten en todo
momento.
Hace como un año,
un domingo por la tarde, regresando de la iglesia todo transcurría de manera
normal: entre juegos y risas, de pronto un pequeño charco resulto ser un gran
bache y Eliza cayo en el, salió volando, ni la manos pudo meter,
sus hermanas horrorizadas no creían lo que estaba viendo pues un
hueso cercano a la rodilla se salió por completo, rápidamente cuando estuvo
otra vez en su silla Eliza con fuerzas lo “acomodo” otras vez en su lugar y les dijo: -- No se preocupen
, no paso nada….
A pesar de ser
muy fuerte le costo un largo tiempo de reposo y convalecencia.
La verdad es que
nunca ha sido quejumbrosa y según ella….Nunca lo será.
Hoy después de
una charla con los directivos de radio ESAD acordaron nuevamente que su
programa regresa al aire…
Eliza sabe que
lograra sus objetivos, cumplirá la promesa que cuando fue niña se hizo, pues,
nuca olvidara a quien estuvo a su lado cuando mas lo necesito,
confía en la fortaleza de su espíritu y jamás se rendirá, como todas las
mujeres es una guerrera, sabe que a veces se pierden batallas, más no la
guerra.
Dios hizo a las
mujeres de un material maravilloso, el amor, ademas les dio fortaleza y
habilidades fuera de lo común, desafortunadamente algunas de ellas lo
ignoran y prefieren estar sentadas comiendo frente a un televisor.
Eliza esta apunto
de llegar a la meta, ella lo sabe…
Dios le dio el
regalo más hermoso… Le hizo mujer.
Ella se dio otro
regalo…se hizo una gran, gran mujer.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)