jueves, 28 de abril de 2011

Un domingo mas



Un domingo más

 Tener un negocio familiar algunas veces tiene sus beneficios, así que este domingo como a la 5 de la tarde decidí que era tiempo de cerrar e irme a descansar.  De regreso a casa Eva, Denise y yo, hicimos una breve escala y  pasamos a una tienda comercial que se llama Cotsco, allí, compramos una especie de tortas que se llaman chicken-bake, ¡Ahhh que cosa, saben delicioso! En esa área de  comida al pagar tu soda  te dan un vaso y te puedes servir las veces que gustes, fue vaso tras vaso, uno después de otro. Declaro públicamente mi adicción a las gaseosas. Al terminar nos fuimos directamente a casa. Llegamos  como a las 6.30 pm y  mi hija Alison ya estaba dormida (en la camioneta) yo apenas toque la cama y a dormir.

Mis hijitos, Alison y Luis me despertaron como a las 8.30 de la noche...

-- ¡Papi, papi, por favor llévanos a la feria! ¡Ándale papa llévanos a la feria! ¡Órale! ¡No seas así!--
Pues  resulta que este domingo se festeja al santo local '' San Lorenzo ‘‘yo no estaba muy convencido de ir  ya que solo son juegos para niños, sin embargo, “mis niños” me convencieron y ahí te va el papa que lleva a sus chavos a la feria…

Mi hijo Luís Alberto tiene 23 años, Alison Denise 14  y mi esposa  Eva  tiene (¿?)  Así que juntos y  a pie nos dirigimos  a la feria. Vivimos al final de una gran pendiente, así que hay que recorrer una gran subida, sin embargo el esfuerzo tuvo su recompensa, así como llegamos al final de la subidita, me esperaba un oasis de sabor. Un puesto de Cervezas preparadas (micheladas),  había como 10 hieleras todas al tope de cervezas y hielo,  Sol, Indio, Corona, León  --¡Madre  mía!-- Exclame en silencio, pues parecía niño chiquito en dulcería.

- ¡Dame, dame, dame!— Le pedí a un joven que atendía ese puesto.
- ¿De cuál le doy?—Me contesto con desgano el muchacho.
- ¡De la que sea pero rapidito, que me vengo muriendo!- Dije en tono de broma.
- ¡Sale una Leooooooooón!

Extendí mis dos manos que ya temblaban de ansiedad, mis ojos se iluminaron y por fin recibí  “mi regalo”
--¡Ayyy ma-ma-ci-ta que a todo dar!-- glub, glub, glub...

Así,  hidratado y  en terreno horizontal, entre una gran cantidad de personas nos dirigimos hacia la iglesia, habría que recorrer cuatro calles de 70 metros de largo y 10 mts de ancho. Los colonos afuera de sus casas  ponen un puesto de lo que sea o rentan ''su lugar'', había de todo, pambazos, tacos, elotes, enchiladas, quesadillas, en fin todo tipo de antojitos mexicanos  y por supuesto más cervezas.

Los vecinos adornaron  las calles con papel picado y banderolas de papel china. La avenida entera vestía colores brillantes, rosa, amarillo, verde, morado, azul y blanco, así, el ambiente festivo inundaba el ánimo de las personas,  mi familia y yo disfrutábamos entre risas y mordiscos a un elote  la verbena popular.

Ya casi para llegar a la iglesia, y dos cervezas mas en el estomago,  se veía un templete con un grupo norteño,  '' Los cadetes de linares ''  --¡Órale!-- exclame sin que nadie lo notara. De pronto el contingente humano nos impidió caminar mas, desde donde estábamos  al escenario  había una distancia como de 150 mts. y  no cabía un alma más en ese sitio,  el castillo (de juegos pirotécnicos)  quedo como a 10 mts de nosotros, una guerra de comentarios  por parte de mi familia llego a mis oídos mientras no dejaban de jalar mi ropa…

--¡Aquí vamos a quedarnos! ¡No seas así!  ¡Queremos ver el castilloooooó! ¡Ándale Papaaaa!--

Y si, allí nos quedamos, disfrutando bailes norteños, música de banda y más cerveza.
Repentinamente un gran estruendo hizo que todos guardaran silencio, los fuegos artificiales hicieron su presentación. Una bomba ilumino el cielo de un color rojo intenso por completo, la expectación de los allí presentes llego al límite. Por fin iniciaría la quema del castillo. Un osado y diminuto hombre trepó la estructura de madera y prendió una mecha, el sonido ensordecedor de los chifladores que hacían girar unas ruedas cautivo a toda la gente, que a su vez, guardo un gran silencio  mientras sus rostros eran iluminados de diferentes colores. Unos hombres abrasaban a sus bebes, otros a sus esposas y uno que otro enamorado le declaraba su amor a la novia, yo simplemente tome un gran sorbo de cerveza. Seis tronidos espectaculares llenaron el cielo con un millón de luces multicolor, Inmóviles, mirando al infinito, con la nuca en la espalda y la boca abierta, todos disfrutamos aquel singular espectáculo, otro gigantesco tronido pareció partir en cielo, se escucho ¡Boooom!  y otra vez se hizo un gran silencio, el cielo se ilumino por completo y miles de voces al mismo tiempo decían  ¡Aaaaaahhhhhh! un trueno mas  ¡ Booooomm! ¡Aaaaaahhhhhh! ¡Booooomm! ¡Aaaaaahhhhhh! Así finalmente llego el clímax, en  lo alto del castillo con luces-multicolores se formo la frase:

-- ¡Viva San Lorenzo!--

Las campanas no dejaban de repicar, la banda tocaba fanfarrias sin cesar y la gente allí reunida comenzó a aplaudir con un ánimo y emoción indescriptible.

 Yo soy muy bueno para calcular cuantas personas hay en un determinado lugar, así que sin lugar a duda habíamos unas 10,000 personas esa noche allí.

El 80 % eran familias es decir padres e hijos, el resto eran jóvenes que simplemente son amigos.

Al terminar el espectáculo,  el rio humano comenzó a dar marcha atrás, todos a sus casas, contentos y felices.

Para mí los santos son Ángeles que Dios nos da para nuestra protección, alguna vez escuche que son legiones.

Este domingo, San Lorenzo en su aniversario, no curo enfermos ni mitigo penas, este domingo, logro que muchos hermanos otra vez se abrasaran, que las familias se unieran, lleno de alegría miles de corazones e  hiso que por unos instantes olvidáramos nuestras penas.

Y por eso doy gracias a Dios.

 Se que este, no fue  un domingo mas....
Fue uno de los mejores.